El cantante solo lleva una semana de grabaciones de la versión
australiana de '
La Voz', pero ya presume de la gran química que mantiene con sus famosos compañeros del programa.
El polifacético artista acaba de comenzar la grabación de los
primeros programas de la edición australiana del popular concurso
musical y, desde el primer momento, el cantante presume de la buena
sintonía que mantiene con sus compañeros en el jurado de la competición.
Aunque Ricky acaba de debutar en el famoso formato televisivo, ya ha
tenido la oportunidad de protagonizar un dueto con el cantante Joel
Madden -integrante de la banda de rock Good Charlotte- y de posar
sonriente junto al resto del panel de coaches, que incluye a Seal y a
Delta Goodrem.
La complicidad que exhibe con el resto de caras conocidas del programa
demuestra la facilidad con la que la estrella latina se está integrando
en el panorama musical de Australia.
"Es genial trabajar con vosotros, chicos, desde el principio tenemos una atmósfera vibrante", compartió Ricky en su perfil de
Twitter tras adjuntar una foto en la que comparte plano con sus amigos, además de rivales, del espacio televisivo.
Aunque sus primeros días de trabajo en la escena televisiva de
las Antípodas se han caracterizado por una gran intensidad, el mediático
vocalista ha tenido también tiempo para relajarse y, sobre todo, seguir
con atención el desarrollo de la gala de los Grammy que tuvo lugar este
domingo en
Los Ángeles.
El astro boricua expresó ante sus seguidores la ilusión que le producía
poder ver la ceremonia desde la lejanía de su nuevo hogar en
Sídney, pero rehusó hacer comentarios sobre el desafío que su amiga
Jennifer Lopez
lanzó a la organización de los premios con un atrevido vestido que
dejaba su muslo al descubierto -la producción del evento envió un
comunicado a los invitados solicitándoles que vistieran con decoro.
"Después de una semana muy intensa de trabajo, ahora toca un
domingo tranquilo en la cama viendo los Grammy. Es simplemente perfecto.
Saludos desde Sídney, mi
gente", escribió posteriormente.
Tras años de amistad y recientes colaboraciones musicales, la
estrecha relación entre Jennifer y Ricky sigue intacta, algo que no se
puede decir de la actual indiferencia que define el vínculo entre el
portorriqueño y el actor mexicano
Eduardo Verastegui.
A pesar de los rumores que indicaban que los dos artistas podrían haber
protagonizado un secreto romance en el pasado, en la actualidad
Verastegui no mantiene ningún tipo de contacto con Ricky y, de hecho,
acaba de aterrizar en Australia para liderar un programa de conferencias
en una universidad católica que versa sobre los males y pecados de la
industria de
Hollywood.
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